Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de 2017

Tratamiento del dolor crónico

El dolor de larga duración  o persistente, en mi opinión mal llamado dolor crónico ya que dicho adjetivo conlleva la creencia de incurable, debe tratarse de forma diferente a lo que se está haciendo hasta hoy día. Uno de los motivos es porque lo que se está haciendo, como estamos observando, sirve para poco, otro, es porque cada día conocemos mejor como funciona nuestro cerebro y hemos observado que él es el causante del dolor persistente (Woolf, Jensena, Malfliet ). Y tercero, porque estamos constatando que el dolor de larga duración, sino curarse en todos los pacientes, si puede aliviarse de tal forma que no mortifique (Montero, Butler) utilizando otros métodos distintos a la farmacoterapia. Lo primero, y más importante, es diagnosticar lo más pronto posible al paciente que puede desarrollar dolor persistente, y no esperar a los seis meses para etiquetar, como dictan los cánones  académicos, que el paciente presenta “dolor crónico”. Por ello, cuando estamos delante de un pacie

Sensibilización, proyección e hipervigilancia

Uno de cada tres pacientes que acude al médico por primera vez presenta síntomas sin que pueda objetivarse patología alguna tras la exploración clínica y las pruebas complementarias adecuadas (Nimnuan). En este caso hacemos el diagnóstico de psicosomatización, somatización, síntomas sine materiae o síntomas sin explicación médica. Hasta hace diez años, desde el psicoanálisis, se han utilizado constructos de tipo hipotético o intrapsíquicos para explicar dicha sintomatología. En los últimos 10 años la neurociencia ha avanzado más que en los últimos cien años, y disponemos de numerosas técnicas como la resonancia magnética funcional, el macroEEG, la estimulación magnética transcraneal y, un último descubrimiento técnico, la optogenética (Klein), que permite mapear las circuitos neuronales. Estamos llegando a lo que Freud ya vaticinó cuando dijo “en el futuro todas nuestras teorías probablemente serán confirmadas o rechazadas con el conocimiento del substrato anatómico”. Gracias a d